Abandonados... o muertos

En este laaargo tiempo de sequía blogística me ha dado tiempo a hacer muchas cosas... principalmente a tenerme que evitar el estudiar jugando a Dragon Quest VIII (diox, mola!) y a Daxter, a irme de cena oficial post-primer curso, a asistir al funeral de mi querido pez Geppokomaru y a no tener que pensar qué pongo en el blog este mes de mierda.

Porque junio es un mes de mierda. Odio el verano y vale, se acaban los exámenes y todo eso pero... no hace frío. Y no llueve. Y la televisión es de un nivel de basura tan reconcentrado y nauseabundo que sólo acercarte te salen granitos. Ah, y me hincho a helados y chocolate. Lo cual está bien si no tuviera que llevar a mi hermano a la piscina y no me diera vergüenza estar como una terneira galega.

Hechas las oportunas quejas hago este post de relleno, porque sí, porque no hay ideas y el mes de junio se quedaría muy soso y muy feo en mis archivos si contase sólo con el adorable y guarrindongo Manji para pasar a la historia.

Últimamente veo a Buenafuente en todas partes, ¿vosotros no? Además de su estupendo, aunque ya no tan original, programa en la infumable Antena 3, me lo encontré en la Feria del Libro de Madrid firmando al por mayor sus monólogos, y también sale en el anuncio de Vodafone. Le habrá dejado la novia, pero forrarse se ha forrado.

Y es entonces cuando oigo dentro de mi atmósfera de doritos y PS2 que ya no es lo que era, que ahora es pura mierda, que ya no mola, vamos. Y es que yo hace mucho tiempo que no lo veía, pero... ¿es para tanto?

La respuesta es relativa. Yo no era fan acérrima de Buenafuente, pero aún hoy me río. Y hay que reconocer que a veces hacen buenas entrevistas, como cuando fue Forges y pusieron todo blanco y negro y al hombrecillo de la bufanda XD. Fue precioso. Mucha gente se sigue quedando sólo con el monólogo del principio, pero a veces hay que ver más. Hacen un humor de calidad, la verdad, que no tiene pinta de caer en los malos tiempos de Crónicas Marcianas mientras el espíritu siga vivo. Ahora bien, ciertas cosas empiezan a oler, y bastante. Sí, estoy hablando del Neng. Afortunadamente parece que están cortando por esa vía e intentan hacer cosas nuevas. Pero algo que no puedo negar es que el 2005 fue su año. Si seguirá así de bien, no lo sabemos. Mientras exista Eva H, yo por lo menos estoy de su parte. Desde que me enteré por fuentes fidedignas de lo ocurrido el día del Orgullo Friki no pongo Cuatro más que por Friends y el anime... -_-

Aquí tenéis el día de Forges. Se ve un poco mal, pero es para que comprobéis que se curraron el escenario:



Supongo que en el fondo me cae bien el hombrecillo. Ah, y sí, cuando esa persona (y no, no era el loco del tren XD) le insultó tan gratuitamente me lancé en su defensa, sí señor, aunque me la sudara. Robbie Williams dijo algo sobre que era uno de los pocos programas buenos que quedaban entre tanta telebasura y aunque hasta a mí me cueste reconocerlo, la verdad es que siguen manteniendo el caché.

Jajajaja, y ahora que estoy, pues os pongo este video del remix que hicieron de Buenafuente en Navidades con... sí, ¡imágenes de Dragon Ball! XD Para los que odiéis a ambos iconos antenatreseros, pues nada, pero los que recuerdan la fusión de Vegeta y Goku, las películas con Broly, el saiyan más feo de todos los tiempos, y a Krilin con la ropa de Piccolo no podéis perderos a este último haciendo el odiado ¡Qué pasa Neeeng! Va por vosotros, que sois frikis y la veíais, lo sé.



Buuufff... creo que sólo me queda un examen (recemos, recemos a Yoda, o a quien sea), y terminarme Dragon Quest. Entonces, y antes de irme a Ramsgate este verano (yeaaaah), prometo poner un post realmente decente. Perdonadme mientras tanto. Estoy espesita y mañana... examen. Ah, y mi pez ha muerto. No os paséis, cabrones. Al menos, dadme el pésame en el comentario.

Saludos!
P.D: Geppo ha muerto. Viva Geppo. Esta vez fue por muerte natural, no salió espuma ni gelatina de sus branquias ni flotó panza arriba como otras veces. Ha sido el segundo pez que más ha aguantado bajo mi cuidado hasta la fecha, y por eso se merece esta mención de honor (el primero fue Trina, ya hablaré de todos ellos). Mis hermanos y yo lo acompañamos hasta el último momento, junto a la taza del váter. Te queremos, Geppo, aunque nunca dejaras de medir dos centímetros. Eras grande.
P.D2: Lucinda, sí es verdad que tengo el blog abandonado como un perro en verano. Pero ahora... ya ni podré abandonar a mi mascota... porque... ha muerto... snif...